domingo, 13 de mayo de 2012

Resucitó el día de su entierro.



Li Xiufeng  de 95 años, sufrió un accidente en su casa de Beiliu, provincia de Guangxi, al tropezar y golpearse la cabeza.
Dos semanas después un vecino la encuentra en la cama, la anciana estaba inmóvil y sin respirar.
Li Xiufeng, es velada en su vivienda,  en un cajón abierto, según la tradición china, para que sus amigos y familiares, la despidan y  presenten sus respetos.
El  día antes del entierro, encuentran  el ataúd vacío,  al recorrer la casa, la ven en la cocina preparando algo para comer.
Li le comentó a sus vecinos que “Dormí  mucho tiempo,  y cuando desperté   sentí mucha  hambre, y quería cocinar algo para comer”.
Según los profesionales “La señora  sufrió de una ‘muerte artificial’, significa que la persona  no respira  pero su cuerpo se mantiene caliente”.
La anciana se salva de ser enterrada viva por la tradición china, o sea que ‘velan al cuerpo durante varios días’.

No hay comentarios:

Publicar un comentario