miércoles, 3 de junio de 2015

Sanatorio Trinidad de Quilmes.

ción concurrimos a la guardia de la Trinidad de Quilmes donde fue atendida por el cirujano Malfussi , quien la operò a la tarde de ese mismo día. Al salir del quirófano este médico nos comunica que debemos realizar una consulta con un cirujano plástico infantil, ya que él se especializa en adultos. Ese mismo día pedimos una entrevista con el cirujano plástico infantil José Sabioli y desde la Trinidad la pediatra Vaccareli hizo lo mismo. La misma Nos informa que el doctor iba a pasar a controlarla el mièrcoles 17/12, pero el mèdico nunca apareciò!!! Luego de preguntar reiteradas veces cuàndo el cirujano se iba a hacer presente (Nosotros como papàs angustiados , preocupados por la situación y con muchas dudas que necesitábamos que nos aclaren), obteníamos como respuesta que el médico estaba en quirófano y que en diez minutos pasarìa... Se hicieron las 21:30 hs y cuando volvimos a preguntar nos dijeron la misma respuesta y diez minutos màs tarde que el médico ya estaba en La Plata. NUNCA PASÓ!!!
Con toda la bronca del mundo, discutimos con el pediatra de turno ese dìa que nos dice que el CIRUJANO SABIOLI no pasó porque no había FACTURADO LA OPERACIÓN y se presentÓ en la habitaciòn el personal de Calidad quien dejó a disposición el libro de quejas , en el cual escribí un descargo de tres hojas al día siguiente.
La doctora Vacarelli, por la mañana temprano, llama al doctor SABIOLI, discute y le dice que se haga presente porque estaba todo mal y que nosotros habìamos movilizado todo en la clínica y es ahí cuando aparece el CIRUJANO SUAREZ (personal de su equipo de trabajo), quien no tenìa ni idea què tenìa nuestra hija y en vez de darnos una soluciòn nos dio un panorama desalentador en cuanto a su rostro.
El cuarto dìa (jueves 18), le realizan nuevamente la curaciòn de la herida y con el paso de las hs ésta se iba agravando, de tal menera que para la curaciòn de la tarde la cara estaba toda AGUJEREADA y la enfermera decide no curarla, porque la misma debìa ser con alcohol y en el estado que estaba la iba a hacer ver las estrellas. Decide entonces llamar a la pediatra de turno, quien no aparecìa a verla. Bajo nuevamente a hablar con el personal de CALIDAD, le cuento todo lo que pasó y al rato aparece la pediatra quien me habla de muy mala manera y entre sus palabras me dice que a mí nadie me explicó que esto era así y que la carne se le tenìa que caer. No dudé un segundo, ya que sabía que algo no andaba bien, la herida estaba cada vez peor, la infección avanzaba así que tomamos la decisiòn de sacarla.
Nos negaron su resumen de historia clínica, a pesar de que es un bebè no tuvieron ni cinco de coordialidad, le sacaron la vía, nos negaron información sobre la dosis de antibiótico que le estaban dando entre otras cosas.
Ese mismo jueves por la noche la ingresamos en el Hospital Garrahan donde fue excelentemente atendida y donde dieron mayor importancia a la infección que era lo que màs nos preocupaba y que en la TRINIDAD minimizaban porque según ellos el antibiótico que le daban era para la mordida de perro. Era tal la infección que ésta le había provocado una parálisis facial...
Esto es un resumen de lo que nos tocó vivir, de la mala atención de la Trinidad de Quilmes, de la falta de ètica, profesionalismo y ni hablar de la parte humana de los profesionales .
Nos dijeron que realizamos una fuga por sacarla de ese lugar y sin ninguna duda fue la mejor decisiòn porque quién sabe hoy que hubiese pasado con esa infección , ya que las palabras de los médicos del Garrahan fueron : LE DIMOS CON TODA LA ARTILLERÍA!!!
Luego de la fuga, el cirujano Malfussi consiguió nuestro teléfono para pedirnos en varias oportunidades que llevemos a nuestra hija a su consultorio de Olivos POR QUÈ SERÁ?

No hay comentarios:

Publicar un comentario